Ramavajan llama a Moisés

La fe es la fuerza de creer en lo que tú piensas

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Importante definición de fe

CDMX, 5/6/2018. Este día Ramavajan platicaba acerca una película que había visto y reflexionaba de este modo: la fe es la fuerza de creer en lo que tú piensas; si tú crees que vas a ser sano, feliz y millonario, lo vas a ser. Pero tienes que encadenar esa fe a esa imagen o concepto y no perder nunca la esperanza —recomendó. También pudo ver un filme de , en donde mencionan que este personaje era tan rápido porque se introducía en un tiempo alterno. ¿Qué me están queriendo decir con eso del tiempo alterno? —se cuestionaba nuestro líder al respecto.


Le acompañan más de tres almas

Como por ese entonces descubrimos que Ramavajan apoyándose con la energía de (que ya no eran tres ), le dije que invocara al ser que tenía que ver con esta película, e invocó al .


Baja Moisés

Mientras se concentraba invocando la presencia de el gran guía del pueblo elegido, Ramavajan volvió a comunicar: la fe es creer en lo que tú crees, me dicen que esto mismo lo está afirmando Moisés. Y yo también percibí su presencia en donde nos encontrábamos: se siente una gran seguridad y fortaleza. Pero Moisés le reclamó a Ramavajan: ¿por qué nunca me habías requerido?, y nuestro líder le dijo que hasta ese momento no había sido necesario. Moisés mencionó que, a partir de esta fecha, va a estar más presente con nosotros, explicando que Ramavajan le tiene que dar entrada a cada uno de los seres de su interior, para que se manifiesten; se requiere esto para traerlos a tu consciente —explicó.


Emociones diversas

Enseguida pregunté cuál es la principal virtud de Moisés que Ramavajan puede aprovechar, y dijo: la fuerza y la fe, que es creer en lo que tú piensas (repitiendo las frases recién mencionadas). Entonces nuestro líder se emocionó: en estos momentos me doy cuenta de que finalmente de que íbamos a ganar la ; no era esperanza como creía recientemente, era fe —y suspiró recordando cuando estábamos luchando contra Ilsravé , pero Oleg se mantuvo hasta el final y le echó aún más energía a la cápsula con la que estaban sometiendo al demonio mayor.


Enlistar los seres

Como nos encontrábamos lejos de Nelluuz, nuestro líder me encargó que le pidiera la lista completa de las , para que él vaya haciendo consciente cada uno de estos seres y pueda ir obteniendo sus virtudes.


El cuate Moisés

Entonces le pedí a Ramavajan que preguntara a Moisés cuál era su virtud y explicó: mi poder es la fuerza. Con cierta esperanza (después de diez años de estar ocupados con nuestra misión), volví a inquirir: ¿Moisés tiene la potestad de lograr que las cosas se den? y respondió que sí. Ramavajan entendió que ése es el principal poder del Maestro Moisés: lograr que las cosas se realicen aquí y ahora; el profeta que guio al pueblo elegido a través del desierto explicó que se hizo presente justo cuando tenía que mostrarse, no antes. Y entonces Ramavajan, con su peculiar frescura, dijo: ya ni me acordaba de "ese cuate". Pero me molesté y le dije: "ese cuate" abrió el mar con su cayado; "ese cuate" golpeó una roca y obtuvo agua; "ese cuate" guio al pueblo a través del mar y todas esas virtudes en realidad son tuyas —reclamé, pero Ramavajan seguía sin entender de qué le hablaba. Sin embargo, ambos estuvimos de acuerdo en que Moisés es un ser de gran dignidad y fuerza.


Golpea la roca

En ese momento le llegó a Ramavajan esta imagen: la fuerza de la fe y preguntó, ¿qué es eso, a qué le llamas la fuerza de la fe? Moisés contestó: es ser firmes. Y entendimos que el Maestro de la firmeza que nos habían mencionado recientemente, era precisamente Moisés. Le relaté a Ramavajan que, cuando Moisés guiaba al pueblo de Israel a través del desierto y no tenían agua, Dios le dijo que golpeara una roca con su cayado, pero la primera vez Moisés dudó —pero la segunda ya lo hizo con fuerza y con fe –subrayó Ramavajan, y en ese momento brotó el agua —ahora sí comprendió el mensaje.


San Pedrito

Nuestro líder ahora señaló: a menudo las personas dudamos por miedo a hacer el ridículo o quedar mal. Recordó un día de su cumpleaños cuando, estando en casa de Guillermo (San Pedro) estaba lloviendo y le pedí que quitara la lluvia (yo con mi , claro), pero Ramavajan no pudo realizar ningún milagro (aunque ya había practicado con él esto anteriormente, y había funcionado), por lo que Guillermo perdió su fe en él. Por más que quise quitar la lluvia, no la quité y Memo se quedó con esa duda —explicó.


Tomar nuestras propias decisiones

Para concluir, Ramavajan comentó que necesitamos aprender a tomar nuestras propias decisiones ya que, por excesiva bondad o un mal entendimiento de la compasión, con frecuencia abusan de nosotros. Y se refirió específicamente a Nelluuz y a mí, quienes en diferentes ocasiones hemos permitido que nos obliguen o sometan debido a que no manifestamos nuestro deseo de hacer respetar lo que queremos. Sin embargo, él también ha padecido por su enorme corazón, por lo que —al comunicarse Nelluuz por teléfono— ella le aconsejó a la distancia: cuídate, cuídate mucho —y colgó.